Nueva York - La muerte de ocho personas después de una explosión de gas en East Harlem esta semana ha vuelto a reabrir el debate sobre el mal estado de las infraestructuras de Nueva York, muchas de ellas centenarias, donde según algunos expertos se necesitan inversiones por $47,000 millones. Vagones de metro con piezas demasiado antiguas para ser reemplazadas, 47 puentes bajo riesgo de fractura, un 30 % de las carreteras en mal estado o los problemas de tuberías o su red de alcantarillado, son solo algunas de las deficiencias detectadas en un informe publicado un día antes de la tragedia.