NUEVA YORK — Creció entre tiroteos, muertes y tráfico de droga. A los 12 años, robaba para comprar la marihuana que consumía. Durante años no le importaba morir o asesinar, todo en nombre de la pandilla.Es la historia de Martínez (20), un inmigrante mexicano exmiembro de la desintegrada ganga Saint James Boys, cuyo territorio se extendió en el vecindario de Bedford Park, en El Bronx, entre las calles 183 y 192.