DOVER, Nueva Jersey — La trágica muerte de la niña ecuatoriana Nohemí Álvarez Quillay (12), quien esperaba reunirse en Nueva York con sus padres pero que se suicidó cuando el grupo de inmigrantes indocumentados con el que buscaba entrar a los Estados Unidos fue detenido en la frontera por autoridades mexicanas, volvió a poner el foco en los enormes riesgos del cruce "al Norte", especialmente en el caso de menores.EL DIARIO/LA PRENSA pudo, sin embargo, confirmar que estos cruces son casi una rutina en Dover, Nueva Jersey, una apacible localidad ub